Porque reconocemos que todas y todos hemos sido creados/as a imagen y semejanza de Dios; que todas y todos somos iguales y compartimos la misma dignidad en la diversidad, queremos hacer llegar nuestra reflexión y llamado a la acción.
1- Si bien hemos creído que la realidad del VIH SIDA es una cuestión que comete a los planes y programas que hacen a las políticas de la salud pública, también el VIH SIDA es una cuestión de justicia y dignidad humana.
2- Despierta en nosotras y nosotros una reflexión. ¿Qué estamos haciendo como tradiciones de fe con las personas afectadas por el VIH y SIDA? ¿Qué pasa en la vida de nuestras comunidades con estas personas?
3- Como personas creyentes queremos asumir este compromiso, no podemos estar ajenos/as a esta realidad que afecta a tantas personas y familias en su dignidad.
Porque es una cuestión de justicia que todas las personas tengan acceso a la información y prevención, a un tratamiento y medicación adecuada sin discriminación, a mantener su sentido de pertenencia a las diferentes redes sociales, especialmente en sus comunidades.
Por tanto, nuestra acción debe ser una voz profética ante la injusticia y nuestro compromiso de acción para transformar la realidad.
4- Para concluir sentimos y entendemos que Dios llama desde nuestras distintas expresiones de fe a abrazar a todas las personas estigmatizadas para compartir espacios verdaderamente incluyentes.
Iglesia Anglicana del Uruguay - Pastoral de Salud
Iglesia de la Comunidad Metropolitana - Comisión Justicia Global
Iglesia Episcopal Antigua - Diversidad Cristiana
Iglesia Evangélica Luterana Unida
Iglesia Metodista en el Uruguay
Uruguay, octubre 2010.-
No hay comentarios:
Publicar un comentario